La inflación es, en términos económicos, el aumento del precio de los bienes y servicios ofrecidos en el mercado durante un período de tiempo determinado (suele hacerse referencia a 1 año).
Clasificación
La inflación puede clasificarse en:
Deflación: es la disminución de los precios. Es la inflación negativa.
Inflación moderada: la inflación moderada se consideraría como un estado “normal”. Hace referencia al incremento de forma lenta de los precios con tasas de inflación que no suelen llegar al 10%. Este tipo de inflación permite un correcto desarrollo de la actividad económica.
Inflación galopante: la inflación galopante sucede cuando los precios se incrementan en tasas de dos o tres dígitos (15, 50 ó 150%) en un plazo promedio de un año, es decir, un bien o servicio podría incluso triplicar su precio en apenas un año. Suelen producirse por cambios económicos importantes.
Hiperinflación: consiste en una pérdida del poder adquisitivo a un ritmo muy elevado. Esto ocurre cuando se registra una tasa de inflación muy alta, con aumentos de precios superiores al 1.000% anual. Este tipo de inflación indica que un país está viviendo una severa crisis económica.
Efectos
Alguno de los posibles efectos de la inflación son los siguientes:
Disminución del poder adquisitivo de los consumidores.
Ralentización o frenado del progreso económico del país al generar desconfianza, tanto a los productores como a los consumidores.
Disminución de la competitividad de los productos del país en el exterior.
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En este enlace puedes ver el ranking de los países según el PIB.
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